Historia de un maratón de mercadotecnia 2010

Después de casi 3 meses en preparación, llego el día en que los chicos del 6to. Semestre de la licenciatura en mercadotecnia de la Universidad de Sonora, Campus Caborca, participarían en el maratón regional de conocimientos de mercadotecnia. El maratón se celebraría los días 29 y 30 de abril en la Ciudad de Mexicali, BC, pero debido al sismo ocurrido en esa ciudad la sede se cambio a Tijuana. La salida se programó para el día jueves 29 a las 3am. Aún con la almohada o sábana incrustada en la cara pero llegamos puntuales. Finalmente salimos de la Ciudad de Caborca con rumbo a Tijuana. El primer tramo de la carretera es bastante malo e incómodo, ya que está en construcción, por ello es probable que nadie se haya dormido en ese trayecto. Vimos el amanecer muy rápido sobre las 5am. Horas más tarde llegamos a San Luis Rio Colorado, que es una ciudad no muy grande (157,076, INEGI 2005) ni tampoco muy atractiva por lo poco que pude apreciar. Y donde según las estadísticas nacen más hombres que mujeres, aunque para esta historia no tiene ninguna relevancia.

Decidimos llegar a desayunar pues los chicos casi se desmayaban de hambre. Optamos por un buffet llamado Santa Fe. Tenían casi de todo y el servicio no fue tan malo. Bueno la sandia estaba desabrida y los burritos parecían de carne pero resultaron ser de frijol. De ahí en fuera, no se les podía exigir más. Con esto fue suficiente para que nos entrara el sueño. Y así fue por un rato hasta llegar a Mexicali. Al entrar a dicha ciudad creo que todos buscábamos algún indicio de que hubo un sismo en días pasados, pero no había nada tal. La ciudad no se miraba tan mal, a pesar de ese desastre.

Nos seguimos de largo y ahí empezó lo divertido del camino, con la Rumorosa!, si bien ya no es tan insegura como antes puede darte nauseas si no pones cuidado. Aun así la vista que ofrece ¡es hermosa! Los colores y tipo de piedras fue lo que más me atrajo. Por fin, llegamos a Tijuana y nos dimos la típica perdida (si no lo hubiera no sería entretenido). Encontramos el Hotel Fiesta Inn y nos registramos. Ahí mismo nos dimos cuenta de que los horarios de las reuniones previas al maratón habían cambiado. Subimos nuestras cosas, descansamos un momento (para que nos diera más hambre) y bajamos a comer.

Lo interesante de ir a comer al restaurante fue que ahí se encontraban el resto de los maratonistas. Todos se miraban sigilosamente observando quien era quien. El servicio fue bueno, aunque la camarera insistía en llamarme señorita, solo me restaba agradecérselo cada vez que lo hacía. El t-bone que pedí no estaba en término medio y el cheesecake que todos pedimos estaba tan congelado que teníamos que utilizar toda nuestra fuerza para sacarle una cucharada. Por la tarde, se registró el equipo, nos dieron la documentación y yo me fui a la reunión con los jueves y demás maestros asesores. Duro casi dos hora donde además de habernos dado los acuerdos por escrito, el resto de maestros insistían en repetirlo, seguro ellos no tenían el agotamiento de andar en una van por más de 9 horas. Pude observarlos y captar todo para poder comentarlo al equipo. Esa noche se dio otro repaso a todo y nos fuimos a descansar temprano.

Al día siguiente, todos en el desayuno se miraban y los chicos se sentían algo nerviosos aunque intentaran disimularlo. Supongo porque iban a lo desconocido como yo, que era la primera vez que participaba en un evento de este tipo. Desayunamos ligero, bueno no todos. Hubo quien le pitó dos veces el ascensor por sobrecarga y tuvo que salirse para risa de todos nosotros….Tomamos el transporte para la Faculta de Ciencias Administrativas de las Universidad Autónoma de Baja California, en él iban los maratonistas de Mexicali, el recorrido fue bastante gracioso pues para desestresarse se pusieron hablar de los nombres-apellidos que tienen un doble sentido. Nos bajamos en la facultad y entramos a la sala audiovisual donde sería la inauguración del evento. En realidad, es una facultad muy bonita en su edificación. Pero algo que me llamó la atención fue que mencionaran que BCS (mi estado) no participaría en el evento. Curioso porque de alguna manera yo estaba representando a Sonora, cosa que creí que jamás pasaría o haría.

Finalmente, después de que hablaran las personas del presídium, dio inicio el maratón. La dinámica fue, que ellos entrarían al laboratorio de computo donde tendrían una computadora con un software avanzado y sin imperfecciones (por lo menos eso dijeron los jueces un día antes) después corrobaremos que no era así. Los maestros asesores seguiríamos en la sala audiovisual donde tendríamos una pantalla con las imágenes de los laboratorios. Creo que nosotros estábamos más perturbados que los alumnos.

Estábamos al pendiente de cada movimiento que nos pudiera indicar que estaba pasando, es algo que no se puede controlar tal vez por ello era más complicado. También se aprovecho para conocer a profesores de otras universidades y hablar temas como el clima, la inseguridad y el marketing en México. Cuando salieron los primeros equipos de la fase primera, hubo quienes dijeron abiertamente que sus niños/niñas ya habían ganado. Al final, me reí de ellos. Entraron a la segunda fase y…pues que el moderno software tuvo un daño, no se podía cargar la segunda fase!!. Todos los maestros asesores hicimos guardia afuera (no nos dejaban entrar) hasta que nos lo explicaron, lo volvieron a correr y de nuevo estaban en la competencia. Esta fase fue más rápida y salieron pronto. Fui a recibirlos y estaban seguros de que todo había salido bien.

Los resultados tardaron demasiado….demasiado….para tener un moderno software, alrededor de 3 horas o no lo recuerdo, tenía un hambre descomunal. Todos estaban muy nerviosos y desesperados, nos entregaron reconocimientos y luego dieron los lugares. Paso algo curioso, cuando dijeron el primer lugar, mencionaron a mi equipo pero luego lo corrigieron. Fue un momento de ilusión! Jeje. La premiación fue para primer lugar Culiacán (UAS), segundo y tercero Chihuahua (UACH).

Aunque lo vimos con tristeza, creo que es una experiencia que no olvidaran, dieron lo mejor de sí, sin embargo, a veces es bueno ver la competencia, lo que hay fuera y no limitarse al espacio que nos rodea, porque ahí es donde encuentras que hay personas que saben más que tú, crees que estás haciendo lo suficiente pero a veces no lo es. A veces hay que ver la derrota como una lección que aprender para demostrarnos a nosotros mismos que podemos hacerlo mejor. Y otras que simple y sencillamente no ganas. Éramos primerizos, y esto no debe desmotivar a los que vienen porque tal vez alguno de ellos si gane el pase para la nacional. Yo les dedico este blog a Abraham, Alberto, Cinthya y Omar, que son personas muy inteligentes y serán grandes mercadologos!

La persona inteligente se recupera de un fracaso, la que no lo es nunca se recupera de un Éxito